Capítulo 160 - Será por mejillas...

Pizarra de clase con un diagrama de flujo de una aplicación en Java

Esperantzara kondenatua...
Eso es lo que esta mañana he cantado, de repente y a los ojos de un compañero, mientras esperábamos en el pasillo la gran mayoría de la clase.
Condenado a la esperanza es lo que reconoce estar el cantante Gari con su canción (bastante moñas). La canción en sí ya estaba fuera de lugar pues ya sabíamos lo que nos tocaba a cada uno, pero no dejaba de creer que, aunque no podía quejarme de estar en la peor situación, tras 2 años una misma persona volvía a darme donde más me duele: en uno de mis casi infinitos defectos, sobre el que no parece todavía tener ni puta idea, sobre el que también escupió entonces... ese que ni el interés, ni el empeño, ni tan siquiera el trabajo duro han sido capaces de superar.

En ese momento la mayoría miraba al suelo: el que no estaba a punto de repetir asumía que su único suspenso iba a ser un saco de plomo de ahí en adelante. Todos menos 3 compartíamos una misma asignatura, y esos 3 privilegiados seguían callados pensando que tambien podian haber sido ellos. Y todos somos conscientes de que las casualidades no existen y que entre el 0 y el 4,9 hay muchas más notas que el cuatro.

La espera, como digo, ha sido tensa. Hemos ido entrando de 2 en 2 los cuatros, pues curiosamente ha sido lo que hemos sacado todos los suspendidos menos uno. No veo oportuno contar lo que iba pasando adentro, pero nuestras caras al salir lo decían todo.
Yo intentaba ocupar mi cabeza con el 6 de programación, un gran triunfo después de 5h de examen y muchos temas de código en Java copiados directamente al compilador. No ha sido un 5, es que ha sido un 6.

6 fueron las horas dedicadas al examen suspendido, más los 30 minutos dedicados a otra prueba más y en ese tiempo uno piensa muchas cosas, sobretodo temas victimistas. Personalmente no había nada más en mi cabeza: el valor de un proyecto de muchas, muchísimas horas de empeño ya había sido lapidado por críticas contradictorias que cambiaban muy poco de un proyecto a otro en lo que a estupidez se referían: en un lugar público la gente no tiene un código sino que puede querer entrar con un pseudónimo (Se ha visto eso en algún polideportivo, por ejemplo?), un usuario no registrado cuando se encuentra con un menu de opciones puede creer que no puede elegirlas aunque las tenga delante y pueda clicarlas, una aplicación es incorrecta porque hay que usar mucho la rueda centrsl del ratón y ésta se puede desgastar, requerimientos en el cuaderno de carga que curiosamente nadie había contemplado... supuestos errores cuyas dudas fueron subsanadas (al consultarlas muco antes de entreharlo) con un "tú eres el creador de la aplicación, yo seguiré tu criterio". De hecho nunca recibí crítica alguna hasta oir que criticaba mi proyecto a mis espaldas sin nisiquiera haberlo probado.

No entiendo cómo le pude creer. Solo sé que, si pudiera retroceder a hace 2 meses, cambiaría muchas cosas empezando por las horas dedicadas a mi aplicación. Un mazazo tras otro, no recibo otra cosa, y aunque me siento orgulloso de ese otro programa solo pienso en el tiempo perdido como en horas de sueño (varios días hasta las cuatro de la noche): había que aprobar tanto el proyecto empezado en Semana Santa como el megaexamen. Yo he suspendido lo segundo y me ha quedado un 5 en lo primero... y todavía esperará que le agradezca el haber aprobado.

El viernes fue cuando lo tuve. A la tarde estuve donde hice las prácticas ayudando a alguien que estaba con el trabajito que me mandaron desarrollar cuando estuve y me enteré de que ya está implantado en un negocio y van camino del segundo. Todo un orgullo para este servidor que no parece tan mediocre o poco trabajador como alguno piensa. También enseñé yo con orgullo la web que hice por mi cuenta con lo que allí me enseñaron. Allí tuvieron en cuenta que era mi primera vez, supieron el trato que hay que dar a un novato, me dejaron a mi aire y optuve mejores resultados de los deseados. Ojo, también supe lo que es la presión. Todo un sueño hecho realidad tras muchos años de un duro trabajo que en ocasiones me ha sido reconocido.

Precisamente alguien dijo que la vida es sueño y los sueños sueños son. Yo tengo mi propia frase: si la vida es sueño, espero despertar pronto. Y es que la pesadilla puede llegar a durar mucho tiempo hasta que al final crees ser el protagonista de una saga sin un final tipo Hollywood. Entonces te das cuenta de que ambas mejillas están en carne viva y de que ya va siendo hora de sustituir esa frase de alfuien pronunció hace poco menos de 2.000 años.