Capítulo 57 - Zaragoza: la Plaza del Pilar

Esto es más largo que la obra del Pilar

Contiene la c: virgen zaragozana muy benerada a la que se le realiza una multitudinaria celebración cada 12 de octubre. Virgen del PILAR, la única capaz de eclipsar a una basílica o incluso a la propia urbe que la guarda con esmero. Porque la mayor parte de la gente que sabe de ella cree que el Pilar es la catedral de Zaragoza, no una basílica. Por eso después de haber insistido en que Zaragoza no sólo es esto voy a hablar ahora de lo que me queda: los edificios de la plaza del Pilar.

Aquí tienes una foto por cada lado de la plaza:

Con la basílica presidiéndola, esta plaza es un lugar abierto justo al Ebro que, más que una plaza, da sensación de ser un gran escenario puesto que las fachadas están cuidadosamente diseñadas para no romper lo más mínimo con la apariencia del conjunto. Es en pocas palabras como un museo al aire libre con un edificio religioso central y otro a cada lado:

     Iglesia de San Juan de los Panetes            y          catedral del Salvador (la Seo)

De la primera, decir que su interio puede recordar a las iglesias del sur porque es blanca completamente. Su torre es renacentista y la fachada barroca. El torreon de la izquierda es independiente a la iglesia, el torreon La Zuda.

A la derecha la catedral de Zaragoza con su alto campanario. En su interior está una de las mejores colecciones de tapices del mundo. Tiene portada barroca y a su derecha, tras un edificio moderno, se ocultan los restos arqueológicos del foro de Caesaraugusta.

También destaca la Lonja, que ahora está dedicada a exposiciones de arte. Este año en las fiestas del Pilar había una exposición de arte moderno del escultor Josep M. Subirachs (Barcelona, 1927).

Desde principios del siglo XX se ha utilizado para exposiciones.

El ayuntamiento, entre La Seo y la Lonja, es un edificio ¿barroco? ¿medieval? ¿renacentista? ¿románico? ¿modernista? ¿gótico? ¿futurista? Dejémonos de estilos porque es uno de los más jóvenes de la plaza. Ni siquiera se ha juvilado: tiene 45 años y no creo que le guste que le calculemos muchos más.

Por último, esta plaza también tiene otros detalles decorativos como fuentes que pasan desapercibidas, callejones mudéjares o galerías que antes estaban llenas de tiendas y que ahora son el lugar ideal para tomar algo en un lugar algo resguardado del frío. Y no te preocupes por los souvenires: frente a los edificios citados hay un sinfin de tiendas de turismo.